Un daño por impacto implica que se ha producido un irreparable daño en la carcasa cuando el neumático ha entrado en contacto violento con ciertos objetos (piedras, baches, etc). Por lo general, se reconoce por un abultamiento en el flanco, lo que indica que los cables han sido dañados en el interior de la carcasa. Si se ignoran tales daños, existe el riesgo de fallo de los neumáticos, por lo general la delaminación de la banda de rodadura y / o los pliegues o desintegración de la pared lateral del neumático.
La gravedad del daño dependerá de la velocidad y el ángulo del impacto. Normalmente son los conductores quienes deben prevenir estos daños aunque hay veces que el impacto es inevitable, por ejemplo cuando un obstáculo aparece de improvisto en la calzada.
Consejo: Bordillos y obstáculos similares deben ser sobrepasados muy lentamente y con un ángulo apropiado (frontalmente)
Tenga en cuenta: en algunos casos es posible confundir daños por impactos con solapamiento en el costado.